El Sporting toma partido
La penúltima de Teobaldo

Teobaldo Antuña
2023-07-08
Cortada la cinta, abierta la Semana; tiempo de saludos entre quienes venimos regularmente, explicaciones de proyectos, invitaciones respectivas a los actos. Hay en este año una alegría general por la marcha de los asuntos semaneros, batiendo marcas de asistencia.
Antes de seguir, debo pedir excusas a Xuanín el de Lada, porque usé una frase suya en asturiano sin citar la fuente. Xuan es forofo de esta nuestra fiesta, colaborador de esta nuestra columna y militante de nuestra llingua; sus comentarios suelen estar orlados por la seriedad del que se ha curtido en la secular cultura del chigre. Por todas estas razones merece nuestro respeto, a la par que nuestra gratitud.
Dentro de esta militancia, estuvo anteayer en la presentación de La Vieya, de Aique Fernandi, en el marco del único premio para narrativa asturiana que sale del peculio particular, el de la editorial Radagast. También de San Martín del Rey Aurelio, como Aique, es Ana Pereira, ganadora con Cuntaora de la presente edición.
Como no va a ser todo libros, en el acto de inauguración de la Semana salieron a relucir la situación política y la del Sporting. Algunos ayuntamientos han cambiado de manos y lo vamos a notar para mal; el club de fútbol también, y tampoco mejora la trayectoria. Curiosa región, Asturias, que de nuevo tiene que levantarse con capital extranjero; Oviedo, Sporting y Duro Felguera van a oxigenarse con pesos mexicanos.
Los más desconfiados señalan el afán capitalista de los Orlegi; dicen que nada más han venido por el interés en el negocio que originaría la transformación de El Molinón; las peñas sportinguistas se quejan de que no las entienden y que vienen con una actitud que va a restar afición.
¡Todo lo contrario! Esta columna, curtida en la escuela del Repórter Tribulete (que en todas partes se mete), ha investigado y puede demostrar con pruebas gráficas que las apariencias engañan.
Así como el alcalde de Langreo se santigua antes de tomar el bastón de mando, pero luego medio levanta el puño en el homenaje a Anita Sirgo; así como el presidente del gobiernín astur besa la Biblia antes de prometer la Constitución, del mismo modo los nuevos amos del club gijonés miran más hacia el proletariado que al capitalismo, de tal manera que han tomado partido, están dispuestos a sumar. En la imagen se ve que se unen a la campaña del último boceto de proyecto de partido de la izquierda española.