Sáhara: medio siglo de ignominia
2023-07-14
Casi medio siglo después de la Marcha Verde, el Sáhara Occidental, nación antiguamente española que debería ser independiente, permanece bajo la férrea bota de la satrapía que la conquistó entonces. Ayer, en la Carpa del Encuentro, se celebró una mesa redonda que convocó a José Ignacio Algueró Cuervo, el fotoperiodista Alex Zapico y Alberto Suárez Montiel a, conducidos por María Luengo, dialogar sobre esta ignominia que tenemos tan cerca y que nos empeñamos en conocer tan poco. Como dijo el profesor Algueró —autor, en el número de A Quemarropa anterior a este, de un artículo especial sobre la historia del conflicto, y las sucesiva traiciones de todos los presidentes españoles—, «el Sáhara Occidental está a cien kilómetros tan solo de las islas Canarias, y pese a esa cercanía física, el desconocimiento sobre esta antigua provincia española es enorme». Algueró hizo un repaso a la historia de la colonización y la apresurada descolonización españolas del territorio para un público atento. Una historia sin final feliz, como transmitía con indignación Alex Zapico: «Cuando yo empezaba en esto del periodismo hace veinte años, me iba a ver los campamentos saharauis y lo que estaba pasando, y puedo decir que casi esta igual, que apenas ha cambiado nada». La norma, allá, es una «vulneración de derechos sistemática, brutal y continuada».
Fueron duros los conferenciantes con el papel negligente, cuando no activo en favor de Marruecos, de los sucesivos gobiernos españoles, y en particular de los socialistas. Alberto Suárez Montiel hizo al final de la mesa un apasionado alegato, que arrancó aplausos, contra «la desfachatez» de la «entrega del pueblo saharaui a su agresor» cometida recientemente por Pedro Sánchez, que a su juicio, en todo caso, no sería sino la última trapacería de un «lobby marroquí que hay en el Estado español» y que sería tanto empresarial como político, encabezado por figuras del partido socialista, «empezando por Zapatero». Miguel Ángel Moratinos o Juan Fernando López Aguilar serían puntas de lanza de este lobby a favor de los intereses de Marruecos en la explotación de los recursos naturales del Sáhara Occidental. Suárez Montiel, presidente de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui en Asturias, no quiso dejar de especificar que no mete «en el mismo saco a la militancia socialista, a los votantes socialistas, a los cuadros intermedios del partido socialista que hacen declaraciones y mociones en sitios» y a una «cúpula que está parasitando el partido socialista» con esas añagazas promarroquíes. Y llamó a que los partidos políticos se atrevan a poner en su programa que defienden el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui mediante referéndum libre, verificable, transparente, imparcial, y no meramente el respeto a las decisiones diplomáticas de Naciones Unidas.